Le hice una promesa a mi piel y a lo que habita debajo.
Le prometí pudor, pero no vergüenza
Le prometí entenderla cuando arde o cuando la soledad la habita
Le prometí vuelos, furia y aventura
Le prometí ser la envoltura perfecta de un corazón
Le prometí noches profundas de luna llena y otras incompletas de tanto amor
Le prometí ser el inicio y el final de mis orgasmos.
No haré maromas para que la quieran,
quien la ame, amará sus esquinas, su centro, sus medios, sus bajos.
Quien la ame amará su corazón con heridas,
las cuidará hasta que sean cicatriz
Le prometí a mi piel ser entera y ser pedazos, pero ser
Le prometí ser franca aún cuando parezca mentira
Le prometí resaca y locura
Le prometí caricias mías y de otros
Le prometí ser todas las mujeres que habitan dentro de ella
y también ser ninguna.
Habitable e inhabitable piel,
prometí darte vida,
y eso haré hasta el fin de mis días.